25 Noviembre, 2023 | 13 Teshiy'iy Jodesh (Kiclev)
PARASHÁ: Bere'shiyth (Génesis) 28:10 - 32:2
Y salió Ya`aqov de Be`er Sheva, y se dirigió a Harán. 11 Y se detuvo en cierto lugar para pasar la noche, porque el sol se había puesto, y se quedó allí toda la noche. Tomó las piedras de ese lugar y las puso como cabecera, y se acostó allí para dormir. 12 Entonces soñó, y he aquí una escalera que estaba sobre la tierra, y la parte superior llegaba al cielo; y he aquí, los ángeles de Elohiym subían y bajaban por ella. 13 Y he aquí, Yahuah estaba sobre ella, y dijo: “Yo soy Yahuah el Elohai de Avraham tu padre, y el Elohai de Yitsjaq. La tierra en la que estás acostado, te la daré a ti y a tu descendencia. 14 Y tu descendencia será como el polvo de la tierra, y te extenderás al occidente, y al oriente, al norte, y al sur. Y en ti y en tu descendencia todas las familias de la tierra serán benditas. 15 He aquí, yo estoy contigo, y te guardaré dondequiera que vayas, y te haré volver a esta tierra; pues no te dejaré, hasta que haya hecho lo que te he dicho.”
16 Y Ya`aqov despertó de su sueño, y dijo: “Ciertamente, Yahuah está en este lugar y yo no lo sabía.” 17 Entonces tuvo miedo, y dijo: “¡Cuán terrible es este lugar! ¡Este no es otra cosa que casa de Elohiym y puerta del cielo!” 18 Y Ya`aqov se levantó temprano en la mañana, y tomó את la piedra que había puesto por cabecera, la erigió como pilar y derramó aceite sobre la parte superior de la misma. 19 Y llamó את el nombre de aquel lugar Beyt-El; pero inicialmente, el nombre de aquella ciudad era Luz. 20 Entonces Ya`aqov hizo un voto, diciendo: “Si Elohiym está conmigo, y me guarda por el camino que voy, me da pan para comer y vestido para vestir, 21 de tal forma que yo regrese otra vez a la casa de mi padre en paz; entonces Yahuah será mi Elohiym. 22 Y esta piedra, que he erigido por pilar será casa de Elohiym, y de todo lo que me dieres, ciertamente te daré la décima parte.”
CAPÍTULO 29
YA`AQOV emprendió su viaje y llegó a la tierra de los orientales. 2 Y miró, y vio un pozo en el campo, y he aquí, había tres rebaños de ovejas junto a él; porque de ese pozo daban de beber a los rebaños, y una gran piedra tapaba la boca del pozo. 3 Allí se reunían todos los rebaños, y rodaban את la piedra de la boca del pozo, le daban de beber a את las ovejas, y ponían את la piedra otra vez en su lugar, sobre la boca del pozo. 4 Y Ya`aqov les dijo: “Hermanos míos, ¿de dónde sois?” Y ellos dijeron: “Somos de Harán.” 5 Y les dijo: “¿Conocéis a Laván, hijo de Najor?” Y dijeron: “Lo conocemos.” 6 Y les preguntó: “¿Él está bien?” Y ellos dijeron: “Está bien; y he aquí, Rajel su hija viene con las ovejas.” 7 Y él dijo: “He aquí, todavía es pleno día, no es tiempo de recoger el ganado; abrevad las ovejas, e id a apacentarlas.” 8 Y dijeron: “No podemos, hasta que todos los rebaños estén reunidos, y hasta que rueden את la piedra de la boca del pozo. Luego, damos agua a las ovejas.”
9 Mientras él aún hablaba con ellos, Rajel llegó con las ovejas de su padre, pues ella las cuidaba. 10 Y sucedió que cuando Ya`aqov vio a את Rajel, hija de Laván, hermano de su madre, y a את las ovejas de Laván, hermano de su madre; se acercó Ya`aqov, rodó את la piedra de la boca del pozo, y dio de beber את al rebaño de Laván, el hermano de su madre. 11 Y Ya`aqov besó a Rajel, alzó את su voz y lloró. 12 Ya`aqov le dijo a Rajel que él era hermano de su padre e hijo de Rivqah. Ella corrió y se lo dijo a su padre. 13 Y sucedió que cuando Laván oyó las noticias de Ya`aqov, hijo de su hermana, corrió a su encuentro, lo abrazó, lo besó y lo trajo a su casa. Y él contó a Laván את todas estas cosas. 14 Laván le dijo: “Ciertamente tú eres hueso mío y carne mía.” Y se quedó con él por espacio de un mes.
15 Y Laván dijo a Ya`aqov: “Porque eres mi hermano, ¿por eso me servirás de balde? dime, ¿cuál será tu salario?” 16 Y Laván tenía dos hijas: El nombre de la mayor era Le'ah, y el nombre de la menor era Rajel. 17 Le'ah era de ojos tiernos; pero Rajel era hermosa, de buen parecer. 18 Y Ya`aqov amó a את Rajel; y dijo: “Te serviré siete años por Rajel, tu hija menor.” 19 Y Laván dijo: “Mejor que te la dé a ti que dársela a otro hombre. Quédate conmigo.” 20 Y Ya`aqov sirvió siete años por Rajel; y le parecieron pocos días, por el amor que le tenía.
21 Dijo, pues, Ya`aqov a Laván: “Entrégame את mi mujer, porque mi tiempo se ha cumplido, para que me allegue a ella.” 22 Laván pues, reunió a את todos los hombres del lugar e hizo un banquete. 23 Y sucedió que al atardecer, él tomó a את su hija Le'ah, y la trajo ante él; y él se allegó ella. 24 Y Laván dio את su sierva Zilpah a su hija Le'ah como sierva. 25 Y aconteció que por la mañana, ¡he aquí que era Le’ah! y él dijo a Laván: “¿Qué es esto que me has hecho? ¿no te serví por Rajel? ¿por qué me has engañado?” 26 Y Laván dijo: “No se hace así en nuestra tierra, de dar la menor antes que a la primogénita. 27 Cumple su semana, y te daremos también את ésta por el servicio que me prestarás otros siete años.” 28 Así lo hizo Ya`aqov, cumplió su semana, y él le dio también a את Rajel su hija por mujer. 29 Y Laván dio su sierva Bilhah a su hija Rajel, para que fuera su sierva. 30 Y él se allegó también a ‘El-Rajel, y amó a את Rajel más que a Le'ah, y le sirvió otros siete años.
31 Y cuando Yahuah vio que Le'ah fue despreciada, él abrió את su matriz, pero Rajel era estéril. 32 Y concibió Le'ah, y dio a luz un hijo, y le puso por nombre Re’uven, porque dijo: “Ciertamente, Yahuah ha mirado mi aflicción; ahora, por lo tanto, mi marido me amará.” 33 Concibió otra vez, y dio a luz un hijo; y dijo: “Porque Yahuah ha oído que yo era odiada, él también me ha dado este hijo.” Y ella llamó su nombre Shim`on. 34 Ella concibió otra vez, y dio a luz un hijo; y dijo: “Ahora esta vez se unirá a mí mi marido, porque le he dado tres hijos.” Por eso se llamó su nombre, Leviy. 35 Volvió ella a concebir, y dio a luz un hijo, y ella dijo: “Ahora alabaré a את Yahuah.” Por eso ella llamó su nombre Yahudáh; y dejó de concebir.
CAPÍTULO 30
CUANDO Rajel vio que no daba hijos a Ya`aqov, tuvo envidia de su hermana y dijo a ‘El-Ya`aqov: “¡Dame hijos o me muero!” 2 y se encendió la ira de Ya`aqov contra Rajel, y dijo: “¿Acaso estoy yo en lugar de Elohiym, que te ha impedido el fruto del vientre?” 3 Y ella dijo: “He aquí mi sierva Bilhah, allégate a ella; y ella dará a luz sobre mis rodillas, para que también yo pueda tener hijos por ella.” 4 Y ella le entregó a את Bilhah su sierva, para ser su mujer, y Ya`aqov se allegó a ella. 5 Concibió, pues, Bilhah, y dio a luz un hijo a Ya`aqov. 6 Y Rajel dijo: “Elohiym me ha juzgado y también ha oído mi voz, y me ha dado un hijo.” Por eso llamó su nombre Dan. 7 Bilhah, sierva de Rajel concibió otra vez, y dio a luz a Ya`aqov un segundo hijo. 8 Y Rajel dijo: “Con grandes luchas he peleado con mi hermana y he prevalecido.” Y llamó su nombre Naftaliy. 9 Cuando Le'ah vio que había dejado de dar a luz, tomó a את Zilpah su sierva, y se la entregó a Ya`aqov para que fuera su mujer. 10 Y Zilpah, sierva de Le’ah dio a luz un hijo a Ya`aqov. 11 Y Le'ah dijo: “¡Qué afortunada soy!” Y llamó את su nombre Gad. 12 Zilpah, sierva de Le’ah, dio a luz un segundo hijo a Ya`aqov, 13 y Le'ah dijo: “¡Feliz yo! porque las hijas me llamarán bendita. “Y llamó את su nombre Asher.
14 Y Re’uven salió en los días de la siega del trigo y halló mandrágoras en el campo, y las trajo a su madre ‘El-Le'ah. Entonces Raquel le dijo a ‘El-Le'ah: “Te ruego me des de las mandrágoras de tu hijo.” 15 Y ella le dijo: “¿Te parece poco haberme quitado את mi marido, que también quieres quitarme las mandrágoras de mi hijo?” Y dijo Rajel: “Pues, bien, él se acostará contigo esta noche por las mandrágoras de tu hijo.” 16 Al atardecer, Ya`aqov venía del campo, y Le’ah salió a su encuentro y le dijo: “Debes allegarte a mí; porque ciertamente te he alquilado por las mandrágoras de mi hijo.” Y él se acostó con ella esa noche. 17 Y Elohiym escuchó a ‘El-Le'ah, y ella concibió, y dio a luz el quinto hijo a Ya`aqov. 18 Y Le'ah dijo: “Porque le he dado mi sierva a mi marido, Elohiym me ha dado mi pago.” Y llamó su nombre Yisshakar.” 19 Y Le'ah concibió otra vez, y dio a luz a Ya`aqov el sexto hijo. 20 Y Le'ah dijo: “Elohiym me ha otorgado una buena dote; ahora mi marido habitará conmigo, porque le he dado seis hijos.” Y llamó את su nombre Zevulún. 21 Después ella dio a luz una hija y llamó את su nombre Diynah.
22 Y Elohiym se acordó de את Rajel, y la oyó Elohiym, y abrió את su matriz. 23 Y ella concibió y dio a luz un hijo; y dijo: “Elohiym se ha llevado את mi afrenta.” 24 Y llamó את su nombre Yosef, diciendo: “Yahuah me agregará otro hijo.”
25 Y sucedió que cuando Rajel dio a luz a את Yosef, Ya`aqov dijo a Laván: Envíame, e iré a mi lugar y a mi tierra. 26 Dame את mis mujeres y את mis hijos, por quienes te he servido, y déjame ir. Porque tú sabes את el servicio que te he prestado.” 27 Y Laván le dijo: “Te ruego, si he encontrado favor en tus ojos, retrasa tu partida; pues he experimentado que Yahuah me ha bendecido por tu causa.” 28 Y él dijo: “Fija tu salario, y yo te lo daré.” 29 Y Ya`aqov le dijo: “Tú sabes את cómo te he servido, y את cómo tu ganado ha estado conmigo, 30 porque poco tenías antes de que yo viniese, y ahora se ha multiplicado sobremanera. Yahuah te ha bendecido desde mi llegada; y ahora, ¿cuándo proveeré para mi propia casa también?” 31 Y él dijo: “¿Qué te daré?” Y Ya`aqov dijo: “No me des nada; si haces esto, volveré a apacentar y a cuidar tu rebaño. 32 Hoy pasaré por todo tu rebaño, y de allí sacaré todo animal salpicado y manchado; todo animal pardo entre las ovejas, y el manchado y salpicado entre las cabras; ese será mi salario. 33 Mi rectitud responderá por mí, el día de mañana, cuando venga delante de ti por mi salario. Todo lo que no sea salpicado y manchado entre las cabras, y pardo entre las ovejas, será contado como robado por mí.” 34 Y Laván respondió: “He aquí, que sea conforme a tu palabra.” 35 Y ese mismo día él retiró את los machos cabríos listados y manchados, את todas las cabras salpicadas y manchadas; todas las que tenían algo de blanco, y todas las pardas entre las ovejas, y los entregó en manos de sus hijos. 36 E interpuso tres días de camino entre él y Ya`aqov; y Ya`aqov alimentó את el resto del rebaño de Laván.
37 Y Ya`aqov tomó varas de álamo verde, de avellano y de castaño, y peló tiras en las cortezas e hizo aparecer lo blanco que estaba en las varas. 38 Y puso את las varas que había descortezado delante de los rebaños, en las zanjas de los abrevaderos donde los rebaños venían a beber, de modo que concebían cuando venían a beber. 39 Y los rebaños concebían delante de las varas, y daban a luz crías listadas, salpicadas y manchadas. 40 Separaba Ya`aqov los corderos, y ponía los rostros de los rebaños en dirección a las listadas, y a todas las pardas en el rebaño de Laván. Así logró sus rebaños, y no los mezcló con los animales de Laván. 41 Y sucedía que cada vez que los más robustos del rebaño se apareaban, Ya`aqov ponía las varas delante del ganado en los abrevaderos, para que se aparearan en medio de las varas. 42 Pero cuando los animales era débiles, no las ponía. Así las más débiles eran de Laván y las más fuertes de Ya`aqov. 43 Y el hombre se enriqueció en gran manera, y tuvo mucho ganado, siervas, siervos, camellos y asnos.
CAPÍTULO 31
Y ESCUCHABA את las palabras de los hijos de Laván, diciendo: “Ya`aqov ha tomado את todo lo que pertenecía a nuestro padre; y de todo aquello que era de nuestro padre, ha obtenido את toda esta riqueza.” 2 Y observaba Ya`aqov את el semblante de Laván y, he aquí, no era con él como antes. 3 Y Yahuah dijo a ‘El-Ya`aqov: “Vuelve a la tierra de tus padres, y a tus parientes; y yo estaré contigo.” 4 Y Ya`aqov envió a llamar a Rajel y Le'ah al campo donde estaba su rebaño, 5 y les dijo: “Observo que את el semblante de vuestro padre, no es para conmigo como antes; pero el Elohiym de mi padre ha estado conmigo. 6 Y sabéis que con toda mi fuerza he servido a את vuestro padre. 7 Y vuestro padre me engañó, y cambió את mi salario diez veces; pero Elohiym no permitió que me hiciera daño. 8 Si él decía así: “Las salpicadas serán tu salario; entonces todos los animales parían salpicadas. Y si decía así: Las listadas serán tu salario; luego todos los animales parían listadas. 9 Así Elohiym le ha quitado את el ganado a tu padre, y me lo ha dado. 10 Y sucedió que en el momento en que el rebaño concebía, alcé mis ojos y vi en un sueño: He aquí que los carneros que montaban los animales eran listados, salpicados y manchados. 11 Y el ángel de Elohiym me habló en sueños, diciendo: ¡Ya`aqov! Y yo dije: Heme aquí. 12 Y dijo: “Levanta ahora tus ojos, y verás, todos los carneros que montan los animales son listados, salpicados y manchados, porque he visto את todo lo que Laván te ha hecho. 13 Yo soy el Elohiym de Beyt-El, donde ungiste el pilar, donde me hiciste voto. Ahora levántate, sal de esta tierra, y vuelve a la tierra de tus parientes.” 14 Entonces Rajel y Le’ah respondieron y le dijeron: “¿Hay alguna porción o heredad para nosotras en la casa de nuestro padre? 15 ¿No somos para él como extrañas? Porque nos ha vendido, y ha malgastado את también nuestro dinero. 16 Porque toda la riqueza de la que Elohiym ha despojado a nuestro padre, es nuestra, y de nuestros hijos. Ahora, todo lo que Elohiym te ha dicho, hazlo.”
17 Entonces Ya`aqov se levantó, y montó את a sus hijos y a את sus mujeres sobre los camellos. 18 Y se llevó את todo su ganado, את todos los bienes que había obtenido, el ganado que había acumulado en Paddan Aram, para ir a ‘El-Yitsjaq su padre en la tierra de Kena`an. 19 Y Laván fue a esquilar את sus ovejas; y Rajel hurtó את los terafiym que eran de su padre. 20 Se escabulló Ya`aqov de את Laván el Arammiy, pues huyó inadvertidamente y sin avisarle. 21 Entonces huyó con todo lo que tenía; y levantándose cruzó את el río, y se dirigió hacia el Monte Gil`ad. 22 Al tercer día le fue dicho a Laván que Ya`aqov había huido. 23 Y él tomó את sus hermanos con él, y lo siguió siete días de camino; y lo alcanzaron en el Monte Gil`ad. 24 Y Elohiym vino a Laván el Arammiy en un sueño de noche, y le dijo: “¡No se te ocurra hablarle a Ya`aqov, ni bien ni mal!”
25 Alcanzó, pues Laván a את Ya`aqov, y Ya`aqov había levantado את su tienda en el monte; y Laván acampó con sus את hermanos en el Monte Gil`ad. 26 Y Laván dijo a Ya`aqov: “¿Qué has hecho, que te has escabullido llevándote a mis hijas inadvertidamente, como prisioneras tomadas a espada? 27 ¿Por qué huiste en secreto, y te escabulliste de mi sin avisarme, pues podría haberte enviado con alegría y con canciones, con tamboril y con arpa? 28 ¿Y no me has permitido besar a mis hijos y a mis hijas? Has actuado tontamente al hacerlo. 29 Está en mi mano el hacerte daño. Pero el Elohiym de tu padre me habló anoche, diciendo: Ten cuidado de no hablar bien o mal a Ya`aqov. 30 Y ahora, aunque necesitabas irte, pues anhelabas la casa de tu padre, ¿por qué has robado את mis elohiym?”31 Y Ya`aqov respondió y dijo a Laván: “Porque tenía miedo; pues dije: Tal vez me quite por la fuerza sus hijas. 32 Quienquiera que sea, con el cual encuentres את tus elohiym, ¡que no viva! ¡Delante de nuestros hermanos reconoce lo que es tuyo de lo que tengo conmigo, y ¡llévatelo!” Porque Ya`aqov no sabía que Rajel se los había robado. 33 Y entró Laván a la tienda de Ya`aqov, a la tienda de Le'ah, y a las tiendas de las dos siervas; pero no los halló. Luego salió de la tienda de Le'ah y entró a la tienda de Rajel. 34 Más Rajel había tomado את los terafiym, los había puesto en la silla de montar del camello, y se había sentado sobre ellos. Y Laván buscó en toda la tienda, pero no los halló. 35 Y ella dijo a su padre: “No se moleste mi adoniy que no pueda levantarme ante ti; pues estoy con la costumbre de las mujeres. Y él buscó, pero no encontró את los terafiym.
36 Entonces Ya`aqov se enojó y reprochó a Laván. Y Ya`aqov respondió y dijo a Laván: “¿Cuál es mi transgresión? o ¿cuál es mi pecado, que me has perseguido tan ardientemente? 37 Mientras buscabas en את mis cosas ¿qué has encontrado entre todos mis utensilios que sea de tu casa? Ponlo aquí delante de mis hermanos y de tus hermanos, para que juzguen entre nosotros dos. 38 Estos veinte años he estado contigo. Tus ovejas y tus cabras no han abortado a sus crías, y no he comido los carneros de tu rebaño. 39 Lo que era despedazado por las bestias, no te lo traía; yo cargaba con la pérdida. De mi mano lo requerías, hurtado de día, o hurtado de noche. 40 Así estuve; la sequía me consumía de día y la helada de noche, y el sueño se apartaba de mis ojos. 41 Así he estado veinte años en tu casa, te serví catorce años por tus dos hijas y seis años por tu ganado, y has cambiado את mi salario diez veces. 42 Si el Elohai de mi padre, el Elohai de Avraham, y el temor de Yitsjaq, no hubiesen estado conmigo, seguramente me hubieses enviado ahora vacío. Elohiym ha visto את mi aflicción y את el trabajo de mis manos, y te reprendió anoche.”
43 Entonces Laván respondió y dijo a ‘El-Ya`aqov: “Estas hijas son mis hijas, y estos hijos son mis hijos, y este ganado es mi ganado, y todo lo que vosotros veis es mío; y ¿qué puedo hacer hoy a mis hijas, o a sus hijos que han nacido? 44 Ahora pues, venid, hagamos un pacto, yo y vosotros; y que sea un testigo entre vosotros y yo.” 45 Y Ya`aqov tomó una piedra, y la erigió como pilar. 46 Y Ya`aqov dijo a sus hermanos: “Recoged piedras; y ellos tomaron piedras, e hicieron un montón; y comieron allí sobre el montón. 47 Y Laván lo llamó Yegar Sahadutha, pero Ya`aqov lo llamó Gal`ed. 48 Y Laván dijo: “Este montón sea un testigo entre tú y yo en este día.” Por lo tanto, se llamó Gal`ed 49 y Mitspah; porque él dijo: “Vigile Yahuah entre tú y yo, cuando nos apartemos el uno del otro. 50 Si afliges a mis hijas, o si tomas otras mujeres además de mis hijas, ¡Mira! nadie está con nosotros. Elohiym es testigo entre tú y yo.” 51 Entonces Laván dijo a Ya`aqov: “He aquí este montón, y he aquí este pilar que he erigido entre tú y yo. 52 Este montón sea testigo, y este pilar sea testigo, que no pasaré de את este montón hacia ti, y que no pasarás de את este montón y de את este pilar hacia mí, para hacerme daño. 53 El Elohai de Avraham, y el Elohai de Najor, el Elohai de sus padres, juzgue entre nosotros. Y Ya`aqov juró por quien temía su padre Yitsjaq. 54 Entonces Ya`aqov ofreció sacrificio sobre el monte, y llamó a sus hermanos a comer pan. Comieron pan y se quedaron toda la noche en el monte. 55 Y a primera hora de la mañana, Laván se levantó, besó sus hijos y sus hijas, y los bendijo. Entonces Laván partió y volvió a su lugar.
CAPÍTULO 32
YA`AQOV siguió su camino, y los ángeles de Elohiym se encontraron con él. 2 Y cuando Ya`aqov los vio, dijo: “Este es el ejército de Elohiym. Y llamó el nombre de aquel lugar Majanayim.
HAFTORÁH: Husha (Oseas) 12:12 - 14:9
Huyó Ya`aqov a la tierra de Aram y por una esposa Yashar’el sirvió, por una mujer cuidó rebaños. 13 Por un profeta Yahuah sacó a את Yashar’el de Mitsrayim, y por un profeta él fue preservado. 14 Efráyim lo ha provocado a ira con más amargura, por tanto, dejará su sangre sobre él, y su Adonai hará volver sobre él su oprobio.
CAPÍTULO 13
CUANDO Efráyim hablaba, se estremecían. Él se exaltó a sí mismo en Yashar’el; pero cuando trasgredió por Baal, murió. 2 Y ahora pecan más y más, y de su plata han hecho imágenes de fundición e ídolos según su propio entendimiento, todo ello obra de artesanos. De ellos dicen: “Que los varones que sacrifican besen a los becerros.” 3 Por tanto, serán como nube mañanera, y como el rocío de la madrugada que se disipa, como la paja que el torbellino arroja de la era, y como humo que de la chimenea sale. 4 Mas, Yo soy Yahuah Elohayka desde la tierra de Mitsrayim, y no reconoceréis elohiym fuera de mí, porque no hay otro que salve, sino Yo.
5 Te conocí en el desierto, en tierra de gran sequedad. 6 Conforme a la abundancia de sus pastizales, así se saciaron, se hartaron, y se ensoberbeció su corazón; por esto, se olvidaron de mí. 7 Por tanto, Yo seré para ellos como león; como leopardo junto al camino los acecharé. 8 Como osa que fue privada de sus crías los encontraré, y desgarraré las fibras de sus corazones; allí los devoraré como león. Las bestias salvajes los despedazarán.
9 Oh Yashar’el, te has destruido a ti mismo; pero en mí está tu ayuda. 10 Yo seré tu Rey. ¿Dónde hay otro que pueda salvarte en todas tus ciudades? ¿Y dónde están tus jueces a los cuales dijiste: “Dame rey y príncipes?” 11 En mi ira te di rey, y en mi enojo te lo quité. 12 Atada está la iniquidad de Efráyim; su pecado está bien guardado. 13 Dolores de mujer parturienta vendrán sobre él, porque es un hijo ignorante; pues no debería demorarse tanto en el momento del alumbramiento. 14 Los rescataré del poder del She’ol; los redimiré de la muerte. ¡Oh muerte! ¡Yo seré tu plaga, oh She’ol! ¡Yo seré tu destrucción! El arrepentimiento estará oculto a mis ojos.
15 Aunque él sea fecundo entre sus hermanos, vendrá un viento solano, viento de Yahuah subirá desde el desierto; se secará su fuente y sus manantiales se agotarán. Él saqueará el tesoro de todos los objetos preciosos. 16 Shomerón quedará desolada; porque ella se ha rebelado contra su Elohiym. Ellos caerán a espada; sus niños de pecho serán despedazados, y sus mujeres embarazadas serán abiertas.
CAPÍTULO 14
¡OH YASHAR’EL, vuélvete a Yahuah Elohayka; pues a causa de tu iniquidad has caído. 2 Tomad con vosotros palabras, y volveos a ‘El-Yahuah. Decidle: “Quita toda iniquidad y bondadosamente acéptanos, así te ofreceremos los sacrificios de nuestros labios. 3 Ashshur no nos salvará; ya no montaremos sobre caballos, ni nunca más diremos a la obra de nuestras manos: ‘Vosotros sois nuestro elohiym’, porque solo en ti el huérfano hallará misericordia.”
4 Yo sanaré su infidelidad, los amaré generosamente, porque mi ira se ha apartado de él. 5 Seré como el rocío de Yashar’el. Él florecerá como el lirio y echará sus raíces como el Líbano. 6 Sus ramas se extenderán; será su hermosura como la del olivo, y su fragancia como el Líbano. 7 Los que moran bajo su sombra, volverán; serán vivificados como el trigo, crecerán como la vid y su aroma será como el vino del Líbano. 8 Efráyim dirá: “¿Qué tengo que ver yo con los ídolos?” Lo escucharé y velaré por él; Yo seré como ciprés verde, de mí es hallado tu fruto. 9 ¿Quién es sabio, para entender estas cosas? ¿Quién es prudente, para que las conozca? Porque los caminos de Yahuah son rectos, y los justos andarán por ellos, mas los transgresores en ellos tropezarán.
BESORÁH: Mattithyahu (Mateo) 2:13 - 4:11
Cuando ellos habían partido, he aquí que el ángel de Yahuah apareció a Yosef en un sueño diciendo: “Levántate y toma al niño y su madre y huye a Mitsrayim, y quédate allá hasta que yo te diga, porque Herodes buscará al niño para destruirlo.”14 Cuando se levantó, tomó al niño y a su madre de noche y partieron hacia Mitsrayim. 15 Y estuvo allá hasta la muerte de Herodes para que se cumpliese lo que Yahuah habló por el profeta, diciendo:
“De Mitsrayim he llamado a mi hijo.”
16 Entonces Herodes, cuando vio que había sido burlado por los sabios, se enfureció enormemente, y mandó matar todos los niños menores de dos años que se encontraran en Beyt Lejem, y en todos sus alrededores, conforme al tiempo que diligentemente había preguntado a los sabios. 17 Entonces se cumplió lo dicho por el profeta Yirmeyahu, cuando dijo:
18 “Se escuchó una voz en Ramah, lamentación, lloro, y gran aflicción; Rajel llorando por sus hijos, y no quiso ser consolada porque perecieron.”
19 Pero cuando Herodes murió, un ángel de Yahuah apareció en un sueño a Yosef, en Mitsrayim, 20 diciendo: “Levántate y toma al niño y a su madre, y ve a la tierra de Yashar’el, porque han muerto los que buscaban la vida del niño.” 21 Y él se levantó y tomó al niño y a su madre, y vino a la tierra de Yashar’el. 22 Pero cuando escuchó que Arjelaus reinaba en Yahud en lugar de Herodes su padre, temió ir allá; sin embargo, al ser prevenido por ‘El en un sueño, cambió su rumbo hacia la región del Galiyl; 23 Y fue y habitó en la ciudad que se llama Natsareth, para que se cumpliese lo dicho por los profetas:
“El será llamado un Netseriy.”
CAPÍTULO 3
EN AQUELLOS días vino Yahujanon el Bautista, predicando en el desierto de Yahud, 2 Y diciendo: “Arrepentíos porque el Reino de los Cielos está cerca.” 3 Pues este es aquel de quien habló el profeta Yesha`yahu, diciendo:
“La voz del que clama en el desierto: Preparad el camino de Yahuah, enderezad sus sendas.”
4 El mismo Yahujanon tenía su vestidura de pelo de camello, y un cinto de cuero ceñido a sus lomos y su comida era langostas y miel silvestre. 5 Entonces iban a él Yerushaláyim, toda Yahud y toda la región de alrededor del Yardán; 6 y eran bautizados por él en el Yardán, confesando sus pecados.
7 Pero cuando él vio que muchos de los parashiym y de los tsadoqiym, venían a su bautismo, les dijo: “¡Oh cría de víboras! ¿Quién os ha advertido para huir de la ira por venir? 8 Por tanto, haced frutos dignos de arrepentimiento; 9 y no penséis dentro de vosotros mismos: ‘Tenemos a Avraham por padre’; porque de cierto os digo que Elohiym es capaz de levantar hijos a Avraham de estas piedras. 10 Y ahora también, el hacha está puesta a la raíz de los árboles, por tanto todo árbol que no de buen fruto será cortado y echado al fuego. 11 Yo en realidad, os bautizo en agua para arrepentimiento; pero el que viene después de mi, cuyas sandalias no soy digno de llevar, es más poderoso que yo; él os bautizará en el Ruaj Ha’Qodesh, y con fuego; 12 su aventador está en su mano, y limpiará completamente su era; juntará su trigo en el granero, mas quemará la paja con fuego inextinguible.”
13 Entonces Yahusha vino desde el Galiyl al Yardán, a Yahujanon, para ser bautizado por él. 14 Pero Yahujanon se lo impidió diciendo: “Yo soy el que necesita ser bautizado por ti, ¿cómo vienes tú a mí?” 15 Y Yahusha respondiendo, le dijo: “Permite que sea así ahora, porque así debe hacerse para que cumplamos toda rectitud.” Entonces él se lo permitió. 16 Y Yahusha, cuando fue bautizado, salió del agua, y he aquí los cielos se abrieron sobre él y vio את el Ruaj Elohiym descender como una paloma y un rayo de luz sobre él; 17 y he aquí, una voz del cielo dijo: “Este es mi yajiyd, en quien estoy grandemente complacido.”
CAPÍTULO 4
ENTONCES Yahusha fue llevado por el Ruaj al desierto, para ser tentado por el demonio. 2 Y cuando había ayunado cuarenta días y cuarenta noches, se sintió hambriento. 3 Y vino el tentador a Yahusha y le dijo: “Si eres el Hijo de Elohiym, ordena que estas piedras se conviertan en pan.” 4 Mas él respondió y dijo: “Está escrito:
‘El hombre no vivirá solo por el pan sino de toda palabra que procede de la boca de Yahuah’.”
5 Entonces el diablo lo llevó a la ciudad sagrada, lo puso en la cúspide del Templo, 6 y le dijo: “Si eres el Hijo de Elohiym, tírate abajo, porque está escrito:
‘Él dará órdenes a sus ángeles con respecto a ti; y en sus manos te sostendrán no sea que en cualquier momento tropieces tu pie contra una piedra’.”
7 Yahusha le dijo: “También está escrito:
‘No tentarás a את Yahuah Elohayka’.”
8 De nuevo, el diablo lo llevó a una montaña muy alta, y le mostró todos los reinos del mundo y la gloria de ellos, 9 y le dijo: “Todas estas cosas te daré, si te postras y me adoras.” 10 Entonces Yahusha le dijo: “Vete Satanás porque esta escrito:
‘Adorarás a Yahuah Elohayka, y solo a Él servirás’.”
11 Entonces el diablo lo dejó, y he aquí ángeles vinieron a servirle.