Hemos escuchado la objeción en cuanto a los libros canonizados y los no canonizados, lo que plantea la pregunta: ¿De qué se trata esto de canonizar un libro? El concilio de Nicea fue el primero en crear un canon (léase: gobierno de la Iglesia católica o "universal", para entonces recién formada). La canonización de los libros fue un asunto de baja relevancia en la lista de temas discutidos y resueltos en este concilio. Además, los libros canonizados allí, no son los mismos que Ud. tiene en su Biblia, a menos que la tuya incluya los libros de Judith y el Apocalipsis de Pedro. Por otro lado, si su Biblia contiene el Apocalipsis, entonces tiene un libro no canónico, al menos según el concilio de Nicea.
Uno podría preguntar: ¿Qué criterio se utilizó para canonizar los libros? Respuesta: ¿Quién lo sabe? La respuesta más obvia es que quienes confeccionaron esa primera lista, seguramente pensaron algo como: CREEMOS QUE ESTOS SON LOS LIBROS QUE ENCAJAN.
Posteriormente, recibimos un nuevo canon del concilio de Laodicea (sí, de la iglesia de los "tibios") que incluyó una lista diferente,; y sí, era diferente a la de los libros de hoy. Finalmente, el concilio de Trento canonizó la Biblia católica moderna que (¿adivinen qué?), incluye los apócrifos. La Biblia Inglesa King James, hasta 1857, también incluía los llamados libros Apócrifos, eliminando toda duda de que estos existían tanto en la Biblia Católica como en la Protestante.
Podríamos afirmar entonces, que si hoy Ud. no está leyendo los libros apócrifos, entonces está ignorando los libros originalmente incluídos en el Canon oficial.
Sin embargo, los que aceptamos el Shabbath como se establece en las Escrituras (el séptimo día, no el octavo ni el primer día, sino el séptimo día) no estamos inclinados a aceptar la opinión de aquellos que crearon una religión que fusionó las doctrinas de la fe, con elementos del paganismo tal como lo practicaban los romanos en ese momento, lo que convenientemente llamaron "canon". En su lugar, nosotros miramos al Textus Receptus, el texto que hemos recibido en griego, arameo y hebreo.
El cautiverio ha sido liberado de la esclavitud romana y su marca, que es el culto dominical (no se describe en ninguna parte del "Canon").
Así que antes de decir que no puedes leer el 4to libro de Esdras, el Primer libro de Macabeos, Sabiduría, Eclesiástico, el Libro de Enoc o el libros de los Jubileos, porque no fueron "canonizados". Te invito a primero considerar la fuente. Los esenios de Qumrán consideraban que los textos de Enoc y Jubileos eran lo suficientemente valiosos como para hacer varias copias de ellos. Tal vez deberíamos tomar mas bien la opinión que ellos tenían de estos libros, y no la de los romanos.