Shemot (Éxodo) 23:7
7 Te alejarás de asuntos falsos. No matarás al inocente (naqiy) ni al justo (tsadiyq), porque Yo no justificaré a los malvados.
Aquí hay unas palabras hebreas que son dignas de consideración mientras exploramos los escritos de Sha'ul:
Inocente: naqiy, que significa irreprensible, limpio, claro, exento, libre, inocente o libre de culpa.
Justo - tsadiyq, que significa justo, legal
Justificar - tsadaq (la raíz de tsadiyq y tsedeqah), que significa tener razón en un sentido moral o forense.
Como analizamos en el último escrito, la palabra griega δικαιος dikaios se entiende mejor como justo, en lugar de recto. La diferencia tiene que ver con el juicio de YAH. Una de las cosas que generalmente se puede extraer del lenguaje de Sha'ul es su conocimiento de jurisprudencia. Es decir, gran parte de su lenguaje tiene que ver con la búsqueda de absolución y justificación, en lugar de una condición de alguien ser hallado inocente o justo a priori. Por tanto esto nos habla, de la condición del hombre en el momento del juicio. Este enfoque es totalmente diferente al usado por Mosheh el cual usa el lenguaje de la ley con proyección al futuro (harás, no harás); mientras que Sha'ul habla de manera contemporánea o retrospectiva.
Ahora, consideremos este pasaje en Romayim (Romanos), con un pequeño cambio para su consideración.
Romayim (Romanos) 3:19-27
19 ¿No sabemos que todo lo que dice la Ley, lo dice a quienes están bajo la Ley, para que toda boca sea cerrada y todo el mundo sea hallado culpable delante de Elohiym? 20 Por lo tanto, por las obras de la Ley ninguna carne es justificada ante sus ojos, porque por medio de la Ley es el conocimiento del pecado; 21 sin embargo, la justicia de Elohiym es manifestada sin la Ley, siendo testificada por la Toráh y los profetas; 22 porque la justicia de Elohiym la cual es por fe (fidelidad moral) en Yahusha Ha’Mashiaj, es para todos y sobre todos los que creen porque no hay diferencia; 23 porque todos han pecado y están destituidos de la gloria de Elohiym, 24 siendo justificados gratuitamente por su gracia a través de la redención que es en el Mashiaj Yahusha; 25 a quien Elohiym ha enviado como propiciación a través de la fe (fidelidad moral) en su sangre (expiación) para declarar su justificación perdonando los pecados cometidos, gracias a la paciencia de Yah; 26 para manifestar, en este tiempo su justificación: que Él es justo y es quien justifica a quien está en la fe de Yahusha Ha’Mashiaj. 27 ¿Dónde está pues la jactancia? Está excluida. ¿Por cuál Ley, por la de las obras? No! Sino por la Ley de la fe (fidelidad moral).
Concluyamos esta reinterpretación con la frase más explosiva del pasaje:
Romayim (Romanos) 3:28
28 Por lo tanto concluimos que un hombre es justificado por fe sin las obras de la Ley.
Si miramos esta discusión históricamente (dentro de los límites de las Escrituras y no fuera de ellas), vemos que se le dio un pacto eterno a toda la Casa de Yashar'el; sin embargo, este pacto fue quebrantado por ellos, de modo que Yahuah emitió un certificado de divorcio, diciendo: Ya no seré más tu marido, sino que me llamarás Padre, según Yermiyahu (Jeremías) 3.
Sin embargo, había una promesa de que el pacto se renovaría; un pacto renovado (Brit Jadashah) que vino a la humanidad como un regalo inmerecido por la expiación de la sangre de Ha’Mashiaj. Tenga en cuenta que la expiación y la posterior resurrección fueron una propiciación completa (acto de YAH sobre el propiciatorio o kippureth) no solo por la ruptura y restauración (tikkun) del pacto, sino que finalmente venció la pena de muerte que estaba sobre la humanidad por causa de Adán. No hay obras de justicia capaces de dejar de lado la muerte, aparte de esta propiciación.
Sin embargo, considere las palabras de la Toráh:
Devariym (Deuteronomio) 6:20-25
20 Y cuando tu hijo te pregunte el día de mañana, diciendo: “¿Qué significan los testimonios, los estatutos y los decretos que Yahuah Elohaynu te ha ordenado?” 21 Entonces dirás a tu hijo: “Nosotros éramos siervos de Far`oh en Mitsrayim; y Yahuah nos sacó de Mitsrayim con mano poderosa. 22 Y ante nuestros ojos Yahuah mostró grandes señales y terribles maravillas sobre Mitsrayim, sobre Far`oh y sobre toda su casa. 23 Él nos sacó de allá para traernos y darnos את la tierra que juró a nuestros padres. 24 Y Yahuah nos ordenó que cumpliéramos את todos estos estatutos, que temiéramos a את Yahuah Elohaynu, para que nos vaya bien siempre, a fin de que Él pueda preservarnos con vida, como hasta hoy. 25 Entonces tendremos justicia, si cuidamos de poner por obra את todos estos mandamientos delante de Yahuah Elohaynu, como Él nos ha mandado.
Por tanto, concluimos que la jayim olam (vida eterna), se basa no en una creencia ciega en "Dios", sino en una creencia en que el pacto fue restaurado y renovado en Ha’Mashiaj por el derramamiento de Su sangre como el cordero de Elohiym; y en que una completa propiciación por la caída de Adán, se obtuvo en su muerte y resurrección. Sha'ul dice que nuestra justificación moral ante el Trono Blanco es obtenida mediante esta fidelidad moral - una fidelidad moral a Ha’Mashiaj, que es la piedra angular (eben rosh pinna) de nuestra fe.
Romayim (Romanos) 3:29-31
29 ¿Es Él, el Elohiym de los yahudiym solamente? ¿no lo es también de las otras naciones? Si, de las otras naciones también; 30 entendiendo que hay un Elohiym, el cual justifica la circuncisión por la fe, y a través de la fe la incircuncisión. 31 ¿Anulamos entonces la Toráh por la fe? ¡Nunca! Antes confirmamos la Toráh.
Mishlei (Proverbios) 7:1-3
Hijo mío, guarda mis palabras y atesora mis mandamientos contigo. 2 Guarda mis mandamientos y vive; y guarda mi Toráh como la niña de tus ojos. 3 Átalos a tus dedos, escríbelos en la tabla de tu corazón.
Nehemías 1:9
9 Pero si os tornáis hacia mi, y guardáis mis mandamientos y los hacéis, aunque algunos de vosotros hayan sido arrojados a la parte más extrema de los cielos, de allí los recogeré y los llevaré al lugar que he elegido para establecer את allí mi Nombre.’
Yahujanón (Juan) 15:8-10
8 En esto mi Padre es glorificado, en que produzcáis mucho fruto; entonces seréis mis talmidiym. 9 Como el Padre me ha amado, así os he amado; permaneced en mi amor. 10 Si guardáis את mis mandamientos, permaneceréis en mi amor, así como yo he guardado את los mandamientos de mi Padre y permanezco en su amor.
Yahujanón (Juan) 14:15-17
15 “Si me amáis, guardad את mis mandamientos. 16 Y oraré al Padre, y os dará otro Consolador para que habite con vosotros para siempre, 17 el Ruaj Emeth, el cual el mundo no puede recibir porque no lo ve, ni tampoco lo conoce; mas vosotros lo conocéis porque habita con vosotros y estará en vosotros.
Yahujanón Rishon (1 Juan) 5:2-3
2 Por esto sabemos que amamos a את los hijos de Elohiym: cuando amamos a את Elohiym, y guardamos את sus mandamientos. 3 Porque esto es el amor a Elohiym: que guardemos את sus mandamientos, y sus mandamientos no son severos.