El dispensacionalismo es una doctrina teológica ampliamente debatida y discutida en los círculos cristianos. Sin embargo, a pesar de su popularidad, hay ciertos aspectos que deben ser cuestionados y analizados más a fondo. En este artículo, nos centraremos en desafiar la visión dispensacionalista desde la perspectiva de las raíces, y cómo esto puede abrir nuevas perspectivas para comprender la fe.
Es interesante notar que existen diferentes corrientes dentro del dispensacionalismo, incluyendo una versión judía y una cristiana. Sin embargo, en mi opinión, ninguna de ellas es completamente precisa. Al profundizar en la doctrina dispensacionalista, uno puede encontrar una tendencia a hacer girar las Escrituras alrededor de las enseñanzas de Pablo. Es fundamental preguntarnos quién es nuestro Mesías y si debemos filtrar las palabras de Yahusha a través de las enseñanzas de Pablo.
Es en este punto donde las raíces y las festividades juegan un papel crucial. Al hablar con dispensacionalistas, es importante resaltar la importancia del Shabbath y las Fiestas.
Por ejemplo, la palabra "Navidad" no se encuentra en la Biblia, y desafío a cualquier persona a encontrarla. Del mismo modo, la palabra "Easter" (Pascua) en la versión King James de la Biblia fue una concesión al Concilio de Nicea. Estos hechos históricos nos invitan a cuestionar las tradiciones impuestas y redescubrir las festividades establecidas por Yah.
Alentemos a los dispensacionalistas a considerar y practicar el Shabbath. No se trata simplemente de tomar un día libre, sino de descansar en Yah. Personalmente, he experimentado el Shabbath como un tiempo de comunión, adoración y estudio de la Palabra junto a otros creyentes. Al enfocarnos en descansar en Yah, encontramos un mayor sentido de paz y equilibrio en nuestras vidas.
Cuando intentamos mostrar a las personas las raíces y las festividades, es esencial destacar la importancia del Levítico 23 y el Cuarto Mandamiento. Estos textos bíblicos contienen enseñanzas fundamentales sobre las Festividades y su significado. Al comprender y aplicar estos principios, se abrirán nuevas perspectivas y el resto de la fe comenzará a desplegarse como los pétalos de una flor.
Desafiar a los dispensacionalistas desde esta perspectiva puede ser un proceso difícil, pero también gratificante. En lugar de discutir sobre las diferencias doctrinales y las creencias sobre el rapto, es más efectivo enfocarse en las raíces y las festividades. Esto proporciona una base sólida para cuestionar la visión dispensacionalista y explorar una comprensión más profunda de la fe.
Es crucial recordar que este desafío no busca imponer una nueva doctrina, sino más bien invitar a una reflexión crítica y un estudio más profundo de las Escrituras.