11 Mayo, 2024 | 3 Sheliyshiy (Ciyvan)
Parshat: Vayiqra (Levítico) 19:1 - 20:27
HABLÓ Yahuah a Moshéh, diciendo: 2 "Habla a toda la asamblea de los hijos de Yashar'el, y diles: Seréis qodeshiym, porque Yo Yahuah Elohaykem soy qadosh.
3 Cada uno temerá, a su madre y a su padre, y guardaréis את mis Shabbaths. Yo soy Yahuah Elohaykem.
4 No os volveréis a los ídolos, ni os haréis elohiym fundidos. Yo soy Yahuah Elohaykem.
5 Cuando ofreciereis un sacrificio de ofrendas de paz a Yahuah, lo ofreceréis de vuestra libre voluntad. 6 Podrá ser comido el mismo día que lo ofrezcáis y la mañana siguiente; pero si sobrare hasta el tercer día, será quemado en el fuego; 7 y si se comiere en el tercer día, será abominable; no será aceptado. 8 Por tanto, todo el que lo comiere cargará su iniquidad, por cuanto ha profanado את lo que se consagró a Yahuah. Esa persona será cortada de entre su pueblo.
9 Cuando cosechéis את la mies de vuestra tierra, no cosecharéis totalmente los rincones de vuestros campos, ni espigaréis los restos de vuestras cosechas. 10 No espigaréis vuestras viñas, ni recogeréis cada uva de vuestras viñas. Las dejaréis para el pobre y el extranjero. Yo soy Yahuah Elohaykem.
11 No hurtaréis, no engañaréis, ni mentiréis el uno al otro.
12 No juraréis falsamente por mi nombre, ni profanaréis את el nombre de vuestro Elohiym. Yo soy Yahuah.
13 No defraudaréis a את vuestro prójimo, ni le robaréis. No retendréis con vosotros el salario del jornalero hasta la mañana siguiente.
14 No maldeciréis a los sordos, ni pondréis tropiezo ante los ciegos; sino que temeréis a vuestro Elohiym. Yo soy Yahuah.
15 No haréis injusticia en el juicio. No favoreceréis al pobre, ni complaceréis al poderoso; sino que con justicia juzgaréis a vuestro prójimo.
16 No andaréis propagando chismes entre vuestro pueblo. Tampoco atentaréis contra la vida de vuestro prójimo. Yo soy Yahuah.
17 No odiaréis a את vuestro hermano en vuestro corazón. Corregiréis a את vuestro prójimo sabiamente para que no incurras en su pecado.
18 No os vengaréis, ni guardaréis rencor contra את los hijos de vuestro pueblo, sino que amaréis a vuestro prójimo como a vosotros mismos. Yo soy Yahuah.
19 Vosotros guardaréis את mis estatutos. No ayuntaréis vuestro ganado con animales de otra especie. No sembraréis vuestro campo con diferentes tipos de semillas, ni vestiréis una prenda mezclada de lino y lana.
20 Cualquiera que se acostare con את una mujer, que fuere sierva prometida a otro varón, sin que hubiere sido redimida, ni liberada; ella será azotada. Pero no serán condenados a muerte, porque ella no era libre. 21 Él llevará a Yahuah, un carnero para la ofrenda por su culpa, a la puerta del Tabernáculo de la asamblea. 22 Y el sacerdote hará expiación por él con el carnero de la ofrenda por la culpa delante de Yahuah, por el pecado que ha cometido, y el pecado que cometió le será perdonado.
23 Cuando entréis en la tierra, y hayáis plantado toda clase de árboles para comer, consideraréis את como incircunciso su fruto. Por tres años os serán como incircuncisos para vosotros. No serán comidos. 24 Pero en el cuarto año, todos sus frutos os serán qodeshiym; consagrados en ofrenda de alabanza a Yahuah. 25 En el quinto año comeréis de את su fruto, para que os produzca y os haga crecer su fruto. Yo soy Yahuah Elohay-kem.
26 No comeréis nada con sangre. No haréis encantamientos, ni practicaréis hechicería. 27 No raparéis en redondo los extremos de vuestras cabezas, ni dañaréis los את extremos de vuestra barba. 28 No haréis ningún corte en vuestro cuerpo por los muertos, ni imprimiréis ninguna marca sobre vosotros. Yo soy Yahuah.
29 No prostituiréis a את vuestras hijas, haciéndolas fornicar; no sea que la tierra se prostituya y se llene de maldad.
30 Guardaréis את mis Shabbaths, y mostraréis reverencia con mi Santuario. Yo soy Yahuah.
31 No vayáis a los que invocan espíritus, ni consultéis agoreros contaminándoos por causa de ellos. Yo soy Yahuah Elohay-kem.
32 Os levantaréis delante de las canas y honraréis el rostro del anciano. Temeréis a vuestro Elohiym. Yo soy Yahuah.
33 Cuando un extranjero morare con vosotros en vuestra tierra, no lo oprimiréis. 34 El extranjero que habitare con vosotros será como un nacido entre vosotros, y lo amaréis como a vosotros mismos; porque fuisteis extranjeros en la tierra de Mitsrayim. Yo soy Yahuah Elohaykem.
35 No haréis injusticia en juicio, ni en medida de tierra, ni en peso ni en otra medida. 36 Balanzas justas, pesas justas, efa justo e hin justo tendréis. Yo soy Yahuah Elohaykem que os sacó de la tierra de Mitsrayim. 37 Por tanto, guardaréis את todos mis estatutos, את todos mis decretos, y los cumpliréis. Yo soy Yahuah."
CAPÍTULO 20
HABLÓ Yahuah a Moshéh, diciendo: 2 "Nuevamente, dirás a los hijos de Yashar'el: Cualquier varón de los hijos de Yashar'el o de los extranjeros que habitan en Yashar'el, que entregare a alguno de su descendencia a Molej, ciertamente será condenado a muerte. El pueblo de la tierra lo apedreará. 3 Pondré את mi rostro contra aquel hombre, y lo exterminaré de entre su pueblo; porque ha entregado de sus descendientes a Molej, contaminando así את mi Santuario, y profanando את mi nombre Qadosh. 4 Si el pueblo de la tierra de alguna manera, cerrare את sus ojos hacia aquel varón para no darle muerte cuando él entregare de su simiente a Molej, 5 entonces Yo pondré את mi rostro contra aquel varón y contra su familia; los exterminaré a ellos y a את todos los que de entre su pueblo hubieren fornicado en pos de él, prostituyéndose con Molej.
6 La persona que consultare a los que invocan espíritus de muertos y a encantadores para prostituirse con ellos, Yo pondré את mi rostro contra esa persona y o exterminaré de entre su pueblo.
7 Santificaos pues y sed qadosh, porque Yo soy Yahuah Elohaykem. 8 Guardaréis את mis estatutos y los cumpliréis. Yo soy Yahuah Meqoddishkem.
9 Porque cualquiera que maldijere a את su padre o a את su madre, ciertamente será condenado a muerte. Ha maldecido a su padre o a su madre; su propia sangre recaerá sobre él.
10 El hombre que quebrantare su voto matrimonial con את la mujer de otro, es decir, quien quebrantare su voto matrimonial con את la mujer de su prójimo, tanto el adúltero como la adúltera, ciertamente serán condenados a muerte. 11 Cualquiera que se acostare con את, la mujer de su padre, ha descubierto la desnudez de su padre. Ambos serán condenados a muerte. Su sangre recaerá sobre ellos. 12 Si un hombre se acostare con את su nuera, ambos serán condenados a muerte; han cometido vileza, su sangre caerá sobre ellos. 13 Si un hombre se acostare את con varón como con una mujer, ambos han cometido abominación; ciertamente serán condenados a muerte, y su sangre caerá sobre ellos. 14 Si un hombre tomare את una mujer y a את la madre de ella, es perversidad; ambos serán quemados con fuego, tanto él como ella, para que no haya maldad entre vosotros. 15 Si un hombre se ayuntare con un animal, ciertamente será muerto; y את el animal será muerto. 16 Si una mujer se allegare a cualquier animal y se ayuntare con él, matarás a את la mujer y al את animal; ciertamente serán condenados a muerte, su sangre caerá sobre ellos. 17 Si un hombre tomare a את su hermana, hija de su padre o hija de su madre, y viere את su desnudez, y ella viere את su desnudez, es cosa perversa; serán exterminados a la vista de su pueblo, él ha descubierto la desnudez de su hermana y cargará su iniquidad. 18 Si un hombre se acostare את con mujer menstruosa y descubriere את su desnudez, su fuente descubrió, y ella descubrió את la fuente de su sangre; ambos serán cortados de entre su pueblo. 19 No descubrirás la desnudez de la hermana de tu madre, ni de la hermana de tu padre, porque habrás descubierto את a sus parientes cercanos; ellos cargarán su iniquidad. 20 Si un hombre se acostare con la mujer de su tío, ha descubierto את la desnudez de su tío; ellos cargarán su pecado, morirán sin hijos. 21 Si un hombre tomare את la mujer de su hermano, es cosa inmunda; ha descubierto la desnudez de su hermano, morirán sin hijos.
22 Por tanto, guardaréis את todos mis estatutos, את todos mis decretos, y los cumpliréis; no sea que la tierra en la cual os introduzco para morar allí, os vomite. 23 No andaréis en las costumbres de las naciones las cuales expulsaré de delante de vosotros; porque ellos cometieron את todas estas cosas, y por eso los aborrecí. 24 Pero a vosotros os he dicho: 'Heredaréis את su tierra, y os la daré para que la poseáis. Una tierra que fluye leche y miel. Yo soy Yahuah Elohaykem, que os he apartado de entre los pueblos.' 25 Por tanto, haréis diferencia entre animales limpios e inmundos, entre aves inmundas y limpias. No os haréis את abominables por los animales, o las aves, ni por ninguna clase de seres vivos que se arrastran en el suelo, los cuales he apartado de vosotros como inmundos. 26 Y vosotros seréis qadosh para mí; porque Yo Yahuah, soy Qadosh y os he apartado de los demás pueblos, para que seáis míos.
27 El hombre o la mujer que invocare espíritus de muertos, o que sea hechicero, ciertamente morirá; los apedrearéis, su sangre caerá sobre ellos."
Haftorah: Amoc (Amós) 9:7-15; Yejezq’el (Ezequiel) 20:2-20
"Oh hijos de Ya-shar'el ¿No me sois vosotros como hijos de los kushiym?" dice Yahuah. "¿No hice subir a את Yashar'el de la tierra de Mitsrayim? ¿Y de Kaftor a los Pelishtiym, y de Qiyr a los arammiym?"
8 He aquí, los ojos de Adonai Yahuah están sobre el reino pecador, y "lo destruiré de sobre la faz de la tierra; mas no destruiré por completo את la casa de Ya'aqov," dice Yahuah. 9 "Porque he aquí, Yo ordenaré, y haré zarandear a את la casa de Yashar'el entre todas las naciones, así como el grano es zarandeado en la criba, sin que caiga el grano más pequeño en tierra. 10 Todos los pecadores de mi pueblo morirán a espada; los que dicen: 'El mal no se acercará ni nos alcanzará'.
11 En aquel día levantaré את el Tabernáculo caído de Daviyd, cerraré את sus brechas, levantaré sus ruinas, y lo edificaré como en los días antiguos; 12 para que posean את el remanente de Edom, y de todas las naciones, sobre las cuales es invocado mi nombre," dice Yahuah que hace esto. 13 "He aquí, vienen días," dice Yahuah, "que el que ara alcanzará al segador, y el que pisa uvas, al que siembra la semilla; y los montes destilarán mosto, y todos los collados se derretirán. 14 Y volveré a traer את del cautiverio a mi pueblo Yashar'el, y ellos edificarán las ciudades asoladas, y las habitarán; y plantarán viñas, y beberán את su vino. También harán huertos, y comerán את el fruto de ellos. 15 Y los plantaré en su tierra, y nunca más serán arrancados de la tierra que les he dado, dice Yahuah Elohayka."
Yejezq’el (Ezequiel) 20:2-20
Entonces vino a mí la Palabra de Yahuah, que decía: 3 "Hijo de A'dam, habla a את los ancianos de Yashar'el y diles: 'Así dice Adonai Yahuah: ¿Habéis venido a consultarme? Como vivo Yo, dice Adonai Yahuah, no seré consultado por vosotros. 4 ¿Los juzgarás, hijo de A'dam? ¿los juzgarás? Hazles saber את las abominaciones de sus padres:
5 Y diles: Así dice Adonai Yahuah: En el día en que escogí a Yashar'el y levanté mi mano delante de la descendencia de la casa de Ya'aqov, y me di a conocer en la tierra de Mitsrayim, cuando levanté mi mano hacia ellos, diciendo: soy Yahuah Elohaykem, 6 en el día en que levanté ante ellos mi mano para sacarlos de la tierra de Mitsrayim a una tierra que Yo había explorado para ellos, que fluye leche y miel, que es la gloria de todas las tierras, 7 entonces les dije: Desechad cada hombre las abominaciones de delante de sus ojos, y no os contaminéis con los ídolos de Mitsrayim. Yo soy Yahuah Elohaykem. 8 Pero se rebelaron contra mí y no quisieron escucharme. No todos los hombres desecharon את las abominaciones de delante de sus ojos, ni abandonaron את los ídolos de Mitsrayim. Entonces dije: Derramaré mi furia sobre ellos para desahogar mi ira contra ellos en medio de la tierra de Mitsrayim. 9 Pero obré por el bien de mi nombre, para que no fuera profanado delante de los paganos, entre los cuales estaban, a cuya vista me di a conocer a ellos, sacándolos de la tierra de Mitsrayim.
10 Por lo cual, hice que salieran de la tierra de Mitsrayim y los llevé al desierto. 11 Y les di את mis estatutos y les mostré את mis juicios, los cuales, si el hombre los hiciere, vivirá por ellos. 12 Además, también les di את mis Shabbaths, para que fueran una señal entre ellos y Yo; para que supieran que Yo soy Yahuah que los santifico. 13 Pero la casa de Yashar'el se rebeló contra mí en el desierto. No anduvieron en mis estatutos y despreciaron mis juicios את, los cuales si el hombre los hiciere, vivirá por ellos, y contaminaron grandemente את mis Shabbaths; entonces dije que derramaría mi furia sobre ellos en el desierto para consumirlos. 14 Pero obré por el bien de mi nombre, para que no fuera profanado delante de los paganos, a cuyos ojos los saqué. 15 También alcé mi mano a ellos en el desierto, para no traerlos a la tierra que les había dado, que fluye leche y miel, que es la gloria de todas las tierras; 16 porque despreciaron mis juicios, y no anduvieron את en mis estatutos, sino que contaminaron את mis Shabbaths porque su corazón iba tras sus ídolos. 17 Sin embargo, mi ojo los salvó de destruirlos y tampoco los acabé en el desierto. 18 Pero dije a sus hijos en el desierto: No andéis en los estatutos de vuestros padres, ni observéis את sus juicios, ni os contaminéis con sus ídolos; 19 Yo soy Yahuah Elohaykem; andad en mis estatutos y guardad את mis juicios y ponedlos por obra; 20 santificad את mis Shabbaths; y serán una señal entre Yo y vosotros, para que sepáis que Yo soy Yahuah Elohaykem.
Besorah: Yojanon (Evangelio de Juan) 7:53 - 10:21
53 Y cada hombre se fue para su propia casa.
CAPÍTULO 8
YAHUSHA se fue hacia el Monte de los Olivos. 2 Temprano en la mañana regresó al Templo, toda la gente se le acercó y sentándose les enseñaba. 3 Y los escribas y parashiym le llevaron una mujer que había sido sorprendida en adulterio, y habiéndola puesto en medio, 4 le dijeron: "Rabbi, esta mujer fue sorprendida en el acto mismo del adulterio. 5 Ahora bien, Moshéh nos ordena en la Ley que debe ser apedreada, mas ¿qué dices tú?" 6 Esto le dijeron tentándolo, para tener algo de que acusarlo. Pero Yahusha se inclinó y con su dedo escribía en el suelo como si no los escuchara. 7 Entonces cuando continuaron preguntándole, se levantó y les dijo: "El que entre vosotros esté libre de pecado, sea el primero en arrojarle una piedra." 8 Y de nuevo, se inclinó y escribía en el suelo. 9 Y los que escucharon, sintiéndose acusados por su propia conciencia se retiraron uno a uno empezando por los más ancianos, hasta el último; y Yahusha quedó solo, con la mujer de pie en el centro. 10 Cuando Yahusha se levantó y no vio a nadie mas que a la mujer, le dijo: "¿Mujer, dónde están tus acusadores? ¿Ningún hombre te ha condenado?" 11 Ella le dijo: "Ninguno, Adonai." Y Yahusha le dijo: "Tampoco yo te condeno; vete y no peques más."
12 Después, Yahusha les habló de nuevo diciendo: "Yo soy la luz del mundo; aquel que me sigue no caminará en tinieblas, mas tendrá la luz de la vida." 13 Por tanto, los parashiym le dijeron: "Das testimonio de ti mismo, por lo cual tu testimonio no es verdadero." 14 Y Yahusha respondió y les dijo: "Aunque doy testimonio de mi mismo, mi testimonio aún es verdadero; porque sé de dónde vengo y a dónde voy; mas vosotros no podéis decir de dónde vengo, ni a dónde voy. 15 Vosotros juzgáis según la carne; yo no juzgo a nadie. 16 Y aún si juzgo, mi juicio es verdadero; porque no soy solo yo, sino yo y el Padre que me envió. 17 También está escrito en los estatutos, que el testimonio de dos hombres es verdadero. 18 Yo soy el que doy testimonio de mi mismo, y el Padre, que me envió da testimonio de mí." 19 Entonces, le dijeron: "¿Dónde está tu Padre?" Yahusha respondió: "No me conocéis a mí, ni a mi Padre; si me hubierais conocido, habríais conocido también a mi Padre." 20 Estas palabras habló Yahusha en la tesorería, mientras enseñaba en el Templo; y nadie le puso las manos encima porque aún no había llegado su hora. 21 Entonces de nuevo Yahusha les dijo: "Me voy y me buscareis, y moriréis en vuestros pecados; a donde voy, no podréis ir." 22 Luego, dijeron los yahudiym: "¿Se suicidará? Porque dice: a donde yo voy no podréis ir." 23 Y les dijo: "Vosotros sois de abajo; yo soy de arriba; vosotros sois de este mundo, yo no soy de este mundo. 24 Por tanto, os digo que moriréis en vuestros pecados; porque si no creéis que yo soy él, moriréis en vuestros pecados." 25 Entonces le dijeron: "¿Quién eres?" Y Yahusha les dijo: "El mismo que desde el principio os he dicho. 26 Tengo muchas cosas que deciros y que juzgar de vosotros; mas el que me envió es verdadero; y hablo al mundo esas cosas que le he escuchado Él." 27 Mas no entendieron que les hablaba del Padre. 28 Entonces Yahusha les dijo: "Cuando hayáis levantado al Hijo de A'dam, entonces sabréis que yo soy él, y que no hago nada por mi mismo; mas como mi Padre me ha enseñado, así hablo estas cosas. 29 Y el que me envió, está conmigo; el Padre no me ha dejado solo porque siempre hago las cosas que lo complacen." 30 Cuando dijo estas palabras, muchos creyeron en él. 31 Luego Yahusha les dijo a aquellos yahudiym que creían en él: "Si permaneciereis en mi palabra, entonces seréis verdaderamente mis talmidiym; 32 y conoceréis את la Verdad, y la Verdad os hará libres."
33 Ellos le respondieron: "Somos simiente de Avraham y nunca fuimos esclavos de nadie; ¿cómo dices: 'Seréis libres?'" 34 Yahusha les respondió: "Amein, Amein; os digo que cualquiera que cometa pecado es siervo del pecado. 35 Y el siervo no habita en la casa para siempre, mas el Hijo habita por siempre. 36 Por tanto, si el Hijo os hace libres, seréis realmente libres. 37 Yo se que sois simiente de Avraham, mas procuráis matarme porque mi palabra no tiene cabida en vosotros."
38 "Hablo aquello את que he visto de mi Padre; y vosotros habláis lo que habéis visto de vuestro padre." 39 Respondieron y le dijeron: "Avraham es nuestro Padre." Yahusha les dijo: "Si fuerais hijos de Avraham, haríais las obras de Avraham; 40 pero ahora procuráis matarme, al hombre que os ha dicho la Verdad, la cual he escuchado de Elohiym; Avraham no hizo así. 41 Vosotros hacéis las obras de vuestro padre." Entonces le dijeron: "Nosotros no somos nacidos de fornicación, tenemos un solo Padre: Elohiym." 42 Yahusha les dijo: "Si Elohiym fuera vuestro Padre, me amaríais; porque procedo y he venido de Elohiym; no he venido por mí mismo, sino que Él me envió. 43 ¿Por qué no entendéis mi mensaje? Porque no podéis oír mi palabra. 44 Vosotros sois de vuestro padre el diablo y los deseos de vuestro padre queréis hacer. Él fue un asesino desde el principio y nunca habitó bajo la Verdad, porque no hay verdad en él. Cuando dice una mentira, habla de lo suyo propio; porque es un mentiroso y padre de mentiras. 45 Y porque os digo la Verdad, no me creéis. 46 ¿Quién de vosotros me redarguye de pecado? Y si digo la Verdad, ¿por qué no me creéis? 47 El que es de Elohiym, oye las palabras de Elohiym; vosotros por tanto no las oís, porque no sois de Elohiym." 48 Entonces los yahudiym respondieron y le dijeron: "¿No decimos bien que eres un shomeroniy y tienes demonio?" 49 Yahusha respondió: "No tengo demonio; mas honro a mi Padre y vosotros me deshonráis. 50 Yo no busco mi propia gloria; hay quien la busca y juzga. 51 Amein, Amein; os digo que si un hombre obedece את mi palabra, nunca verá la muerte." 52 Le dijeron entonces los yahudiym: "Ahora sabemos que tienes demonio. Avraham está muerto, y los profetas; y dices: 'si un hombre obedece את mi palabra, nunca verá la muerte'. 53 ¿Acaso eres tú superior a nuestro padre Avraham, que está muerto? Y los profetas están muertos; ¿quién te haces a ti mismo?" 54 Yahusha respondió: "Si me honro a mi mismo, mi honra no es nada. Mi Padre es quien me honra, del cual vosotros decís que es vuestro Elohiym; 55 aún así, no lo conocéis, mas yo lo conozco; y si yo dijera que no lo conozco, seria mentiroso ante vosotros; mas lo conozco y obedezco את su palabra. 56 Vuestro padre Avraham se regocijó de ver את mi día; y lo vio y se complació." 57 Entonces, los yahudiym le dijeron: "Aún no tienes cincuenta años ¿y has visto a את Avraham?" 58 Yahusha les dijo: "Amein, Amein; os digo que antes de que Avraham fuera, YO SOY." 59 Entonces tomaron piedras para arrojárselas, pero Yahusha se escondió y pasando por en medio de ellos salió del Templo.
CAPÍTULO 9
MIENTRAS Yahusha pasaba, vio a un hombre ciego de nacimiento. 2 Y sus talmidiym le preguntaron diciendo: "¿Rabbi, quién pecó, este hombre o sus padres, para que naciera ciego?" 3 Yahusha respondió: "Ni este hombre pecó, ni sus padres; mas para que las obras de Elohiym fueran manifiestas en él. 4 Debo hacer las obras del que me envió mientras es de día; llega la noche cuando ninguno puede trabajar. 5 Entre tanto que permanezca en el mundo, yo soy la luz del mundo." 6 Y habiendo hablado, escupió en el suelo e hizo barro con la saliva; untó los ojos del ciego con el barro, 7 y le dijo: "Ve y lávate en el estanque de Shiloaj, (que significa, enviado)." Por lo tanto se fue, se lavó y regresó viendo.
8 Entonces los vecinos y los que antes habían visto que era ciego decían: "¿No es este el que se sentaba y mendigaba?" 9 Algunos decían: "Este es"; otros decían: "Se parece a él"; mas él decía: "Yo soy." 10 Por tanto le dijeron: "¿Cómo fueron abiertos tus ojos?" 11 Respondió y les dijo: "Un hombre llamado Yahusha, hizo barro, lo untó en mis ojos y me dijo: 'Ve al estanque de Shiloaj y lávate'; fui me lavé y recibí la vista." 12 Entonces le dijeron: "¿Dónde está él?" Él dijo: "No se."
13 Llevaron ante los parashiym, al que antes era ciego. 14 Y era Shabbath cuando Yahusha hizo el barro y abrió sus ojos. 15 Entonces los parashiym le preguntaron de nuevo cómo había recibido la vista. Él les dijo: "Él puso barro en mis ojos y me lavé y veo." 16 Por lo tanto, algunos de los parashiym dijeron: "Este hombre no es de Elohiym, porque no guarda el Shabbath." Otros decían: "¿Cómo puede un hombre que es pecador, hacer tales obras?" Y había división entre ellos. 17 Le dijeron de nuevo al ciego: "¿Qué dices del que te ha abierto tus ojos?" Él dijo: "Él es un profeta." 18 Pero los yahudiym no le creyeron que había sido ciego y había recibido su vista, hasta que llamaron a los padres del que había recibido la vista, 19 y les preguntaron diciendo: "¿Es este vuestro hijo, el que decís que nació ciego?, ¿Cómo entonces ve ahora?" 20 Sus padres les respondieron diciendo: "Sabemos que este es nuestro hijo y que nació ciego; 21 pero por qué ahora ve, no lo sabemos; o quien abrió sus ojos, no sabemos; ¡él ya tiene edad, preguntadle! Él hablará por sí mismo." 22 Los padres dijeron estas palabras porque tenían temor de los yahudiym; porque los yahudiym ya habían acordado que si alguien confesaba que él era el Mashiaj, sería expulsado de la sinagoga. 23 Por tanto sus padres dijeron: "Ya es de edad, preguntadle." 24 Entonces llamaron de nuevo al hombre que era ciego y le dijeron: "Da la honra a Elohiym. Sabemos que este hombre es un pecador." 25 Él respondió y dijo: "Si es pecador, no lo sé; una cosa sé, y es que yo era ciego y ahora veo." 26 Entonces, le dijeron de nuevo: "¿Qué te hizo? ¿cómo abrió tus ojos?" 27 Les respondió: "Ya os lo he dicho y no oísteis; ¿por qué lo queréis oír de nuevo? ¿Deseáis también ser sus talmidiym?" 28 Entonces lo ultrajaron y le dijeron: "Tú eres su talmiyd, mas nosotros somos talmidiym de Moshéh. 29 Sabemos que Elohiym le habló a Moshéh; mas de este hombre, ni sabemos de donde viene." 30 El hombre respondió y les dijo: "Por cierto, eso si es una gran cosa, que no sepáis de dónde viene, y aún así, él me ha abierto los ojos. 31 Ahora, sabemos que Elohiym no oye a los pecadores, mas si cualquier hombre es adorador de Yah y hace su voluntad, a él oye. 32 Desde el principio del mundo no se ha escuchado de ningún hombre abriendo los ojos de uno que nació ciego. 33 Si este hombre no fuera de Elohiym, no podría hacer nada." 34 Respondieron y le dijeron: "Naciste completamente en pecado, y nos enseñas?" Y lo echaron. 35 Yahusha oyó que lo habían echado; y cuando lo encontró le dijo: "¿Crees en el Hijo de Elohiym?" 36 Él le respondió y dijo: ¿Quién es, Adonai, para creer en él? 37 Y Yahusha le dijo: "Lo has visto y el que habla contigo, él es." 38 Y dijo: "Adonai, yo creo"; y le adoró.
39 Y Yahusha dijo: "Para juicio he venido a este mundo, para que los que no ven, puedan ver, y para que los que ven sean enceguecidos." 40 Y algunos de los parashiym que estaban con él oyeron estas palabras y le dijeron: "¿Acaso nosotros somos ciegos también?" 41 Yahusha les dijo: "Si fuerais ciegos, no tendríais pecado; mas ahora por cuanto decís: '¡Vemos!', vuestro pecado permanece.
CAPÍTULO 10
AMEIN, Amein; os digo que aquel que no entra por la puerta al corral de las ovejas, sino que trepa por otro lado, este es ladrón y salteador. 2 Mas el que entra por la puerta, es el pastor de las ovejas. 3 A este, el portero le abre, y las ovejas oyen su voz; y llama a sus propias ovejas por nombre, y las guía hacia afuera. 4 Y cuando ha sacado todas sus ovejas, va delante de ellas y las ovejas lo siguen porque conocen su voz. 5 A un extraño no seguirán, sino que huirán de él, pues no conocen la voz de los extraños." 6 Yahusha les dijo esta parábola, pero ellos no entendieron qué eran estas cosas que les decía. 7 Luego Yahusha les dijo de nuevo: "Amein, Amein; os digo que yo soy la puerta de las ovejas. 8 Todos los que vinieron antes de mi son ladrones y salteadores; mas las ovejas no los oyeron. 9 Yo soy la puerta; si alguno entra por mi, será salvo; y entrará y saldrá y hallará pastos. 10 El ladrón solo viene para robar, matar y destruir; yo he venido para que tengan vida, y para que la tengan más abundantemente. 11 Yo soy el Buen Pastor; el buen Pastor da su vida por las ovejas. 12 Mas el que es asalariado y no el pastor, de quien no son propias las ovejas, ve venir al lobo, deja las ovejas, huye, y el lobo atrapa y esparce las ovejas. 13 El asalariado huye, porque es asalariado y no se preocupa por las ovejas. 14 Yo soy el Buen Pastor y conozco mis ovejas, y yo את soy conocido por las mías. 15 Como el Padre me conoce, así yo conozco al Padre y entrego mi vida por las ovejas. 16 Tengo otras ovejas que no son de este rebaño; a ellas también traeré y oirán mi voz; y habrá un solo rebaño y un solo pastor. 17 Por eso mi Padre me ama; porque entrego mi vida para tomarla de nuevo. 18 Ninguno me la quita, mas por mi propia voluntad la entrego; tengo potestad para entregarla y tengo potestad para tomarla de nuevo. Este mandamiento he recibido de mi Padre."
19 De nuevo, se generó una división entre los yahudiym por estas palabras. 20 Y muchos de ellos decían: "¡Tiene demonio! ¡está loco! ¿por qué lo escucháis?" 21 Otros decían: "Estas no son palabras de un endemoniado. ¿Acaso puede un demonio abrir los ojos a los ciegos?"