Bere'shiyth (Génesis) 28:10 - 32:2
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Ya`akov, de manera similar a Avraham, deja atrás su comodidad y el calor de su familia, para ir en busca de su destino, convirtiéndose en el padre de las doce tribus de Yisrael. Huir para salvar la vida de manos de su hermano, era solo una circunstancia que le impulsaría en ésta búsqueda; pero una vez más podemos ver cómo Yahuah es Quien controla la historia y cuida de sus hijos para llevar a cabo sus planes eternos.
Es muy probable que Ya`akov se sintiera solo y muy vulnerable. Mas el sueño le confirma que no lo está y que incluso está protegido por los ángeles de Yahuah quienes suben primeramente y luego bajan, dando a entender que han estado con él en su jornada. Entonces Yahuah desde la parte superior de la escalera le confirma la promesa hecha a su padre y a su abuelo.
La escalera nos muestra la permanente conexión entre el cielo y la tierra así como la fidelidad y cuidado del Padre por sus hijos. Al despertar, Ya`akov, impactado por la revelación que acaba de recibir, toma una piedra, la unge con aceite y hace un voto como muestra de gratitud por las promesas de Yahuah:
Bere'shiyth (Génesis) 28:20-22
...Si Elohiym estuviera conmigo y me protegiera en este camino que ando, y me diera pan para comer y vestido para vestir, y yo volviera en paz a casa de mi padre, y Yahuah llegara a ser mi Elohiym, entonces ésta piedra que he puesto como estela será casa de Elohiym, y de todo lo que me des, de seguro apartaré el diezmo para ti.
No sobra recordar que Ya`akov terminó cosechando lo que sembró: Así como engañó, fue engañado, pues la ley establecida por Yahuah así lo determina. A pesar de todo, Yahuah le promete Su compañía y así comienza su regreso a casa, siendo ésta una demostración de la abundante Gracia de Elohiym en el Tanak (Antiguo Testamento).
En el encuentro de Ya`akov con Laván, nos hallamos con otro voto hecho por los dos. Ahora tanto en los votos hechos por Ya`akov sólo, como en éste, una piedra, estela ó monumento, es levantado en memoria de tales compromisos.
Si tenemos cosas físicas que nos recuerden los compromisos que hemos hecho, será más fácil cumplir con ellos. Es el caso de los anillos de compromiso o matrimonio. Y por cierto, si las parejas escribieran sus votos matrimoniales, les pusieran un marco y los colgaran en las paredes de su habitación, donde tuvieran que verlos y recordarlos frecuentemente, muy probablemente se verían más motivados a “cumplir sus votos”.
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